15.5.12

Hartos e Indignados


Salió a trabajar como todos los días. Detrás del mostrador alguien le dice algo. Se da vuelta y BANG. Se le acabó la vida. Un tipo común, en un día común, en un trabajo común, con un nombre común: "Papá".



Se despertó tarde, lo pasaron a buscar. El fierro contra el hueso. 
¿
El motivo? No se acuerda. No sabe. No importa. No puede pensar sin pacochi y sin lata. 


Situaciones cotidianas, de una sociedad cada vez más golpeada. Qué se perdió y de quién es la culpa, poco importa ahora. Hay un problema que resolver y requiere de todas nuestras energías para hoy y para mañana. Educación es la clave. Prevención, siempre prevención. Pero con lo que ya está, ¿qué hacemos?

Son muchos los que han estudiado el crimen y claramente no hay recetas mágicas para erradicarlo, pero parece que sí podemos hacer cosas para disuadirlo.

Lawrence Sherman estuvo en Uruguay y desde presidencia se sube un racconto de la nota, no la nota original y se maneja, a mi juicio, tendenciosamente la información. El reconocido criminólogo responde, entre otras cosas a la pregunta de un periodista acerca de si bajar la edad de imputabilidad penal aumentaría la delincuencia: 

“La aumentaría si se utiliza para los de baja peligrosidad. Si a ellos se los pone en la cárcel se los arruina, porque hace que se ponga peor. (Respuesta bastante esperable y que a todos nos resulta hasta intuitivo). 

Reduciría el delito si se lo usara de una forma muy selectiva, para los chicos de 16 años que dispararon a alguien o violaron. Pero esto hay que limitarlo mucho y no decir solamente “que lo decida el juez”. 

· Perfecto, hagámosle caso entonces, implementémoslo de forma muy limitada y con todo el cuidado que se requiera. Traemos un experto que nos dice esto, nos allana el camino. Bajemos la edad de imputabilidad penal y apliquemos la misma pena que a los mayores de 18 a aquellos individuos que matan y violan, como el asesino de Gastón si es que le cabe. Y a los otros, pongámoslos en el instituto especial… Ese que estamos por crear hace no sé cuántos meses, pero que funcione y que suplante la inoperancia del INAU. Vamos, que para hacer un buen plan de trabajo y rehabilitación para estos muchachos en Uruguay hay gente de sobra capacitada. Y ¿la plata para financiarlo? Aparentemente sobra en Antel y en algunos otros rubros también así que tomémosla de allí, no creo que nadie proteste siendo este un tema que nos urge a todos. 

Sabemos que quiénes rapiñan buscan plata rápido. ¡Perfecto! 

· ¡Saquemos el efectivo de circulación! No puede ser tan complicado. Sistemas de tarjetas de crédito ya tenemos y transporte con tarjeta SIM también. ¡Este punto es un boleto!

Ahora viene la parte complicada… la corrupción. No solo en la policía. Aunque sanear la policía es fundamental y urgente. Y es que la policía somos todos. Es nuestra idiosincrasia la que se ve en las instituciones. En el gobierno. No podemos permitir más corrupción en el país, de ningún tipo, de ningún color de guante. 

· Denunciemos a los compañeros corruptos, al vecino que tira la basura en la calle, al que afana, al que se queda con el cambio, al que falta el respeto, al que miente, al que hace de menos, al que hace mal en todos los niveles de responsabilidad. No importa si es el guarda de bondi o si es el presidente de la república. No nos quedemos callados. Está en juego nuestro propio pellejo, siempre. ¿No se dan cuenta? Me tienen harta los cobardes. Los que miran para el costado. Los que ni siquiera ven. Las veces que me la tuve que jugar aún sabiendo que era más fácil callar… pero con la consciencia tranquila y los pantalones bien puestos llegaremos a buen puerto al final, se los aseguro. 

¿Y el sistema de emergencia 911? Vamos, no puede ser tan imposible de conseguir un poco más de eficacia. Empecemos con una, por ahora:

· Operadoras que sepan atender los teléfonos en una emergencia derivando las llamadas de forma adecuada. ¡Capacitémoslas! (si hace falta plata se la pedimos a Los Olimareños). ¿Hacen falta líneas y teléfonos? Listo, le pedimos a Antel. ¿Y captor de llamada tienen? Si no, avisen que hacemos una vaquita.